El dólar podría seguir retrocediendo y ubicarse en el piso de la banda de flotación dispuesta por el Gobierno, en torno de los mil pesos, según proyecciones del Banco Central.
En una entrevista en Radio Rivadavia, Federico Furiase, miembro del equipo económico de Luis Caputo y director del Banco Central, analizó el impacto del levantamiento del cepo cambiario y proyectó un escenario de convergencia del dólar hacia el piso de la banda, cercano a los 1.001 pesos. De esta forma, se refuerza la intención oficial de empujar a la baja la cotización de la divisa norteamericana.
El presidente Javier Milei ya había señalado la posibilidad de que el dólar caiga a 1.000 pesos, y dijo que en ese caso el Banco Central saldría a comprar. En ese sentido, Furiase dijo que la estabilidad del dólar, que cerró cerca de 1.125 pesos se debió a "macrofundamentos sólidos".
Mencionó como hechos claves el superávit fiscal, la eliminación de la emisión monetaria y el saneamiento del balance del Banco Central. Sostuvo, además, que "el acuerdo con el FMI incrementó las reservas líquidas de libre disponibilidad, lo que fortalece la credibilidad".
"El Banco Central tiene un dólar de cobertura de 911 pesos gracias a las reservas. Además, la banda cambiaria tiene un piso en 1.000, que se ajustará 1% mensual hacia abajo", explicó.
En cuanto al costo de vida, Furiase destacó que la base monetaria está "congelada" debido al superávit fiscal, que retira pesos de circulación.
También le envió un mensaje a los fabricantes que quieran remarcar: "La emisión monetaria terminó. Si los precios suben sin respaldo en la demanda es por arte de magia y las empresas perderán ventas", advirtió.
"En una macro estable, los agentes económicos no pueden trasladar precios arbitrariamente", explicó.
Según Furiase, la baja del dólar se produce por la reducción de pesos en circulación, absorbidos por el superávit y el nuevo bono Bopreal (suscrito en pesos por empresas), y la liquidación de divisas del campo antes del aumento de retenciones en junio.
A esto se suma, explicó, la entrada de capitales extranjeros al mercado local y la defensa activa del Banco Central en el piso de la banda.
Dijo que "el dólar bajó de 1.360 a 1.125 porque la macro está saneada. No fue casualidad: hubo causalidad en las políticas aplicadas".
Furiase justificó la continuidad del impuesto país para compras en dólares con tarjeta, a pesar de que la gente ahora puede comprar los dólares y pagar en esa moneda. Al respecto, dijo que si bien ahora las personas pueden comprar dólares libremente, "sigue siendo clave evitar usar tarjetas en el exterior".